¡Haz que Beyoncé te pida consejos!

La semana pasada muchos de mis antiguos clientes y #estrellasrandycoaching me contactaron para contarme cosas muy buenas. Algunos recibieron coaching conmigo hace 2 años, 1 año, y otros hace algunas semanas o meses, pero todos (absolutamente todos) me escribieron contentos con sus resultados. Lejos de contarme que la experiencia fue toda de color rosa, lo que me quisieron decir fue esto: El tiempo que he invertido en mí me ha dado grandes resultados. Hoy, si bien participas en eventos que contribuyen a tu desarrollo personal, o si solo te tomas el tiempo para leer boletines como este (y haces algo al respecto), cada actividad que haces y está relacionada con tu crecimiento personal es tiempo que inviertes en ti. Por favor, síguelo haciendo. Si bien la vida tiene momentos altos y bajo, este tiempo que inviertes en ti nadie te lo quita. Y esta historia me lleva a otra bastante inspiradora e interesante. La historia de Ana... En realidad no se llama así, pero para efectos de este correo la llamaremos Ana. Era la segunda vez que Ana me escribía desesperada porque descubrió que su pareja la estaba engañando. Conociendo a Ana y la bonita forma de ser que tiene, puedo decirte que ese día estaba en su momento más oscuro. Mientras sé lo doloroso que es el engaño y la traición de alguien importante, sé también que estas situaciones ocurren para un propósito más grande que el de alimentar nuestro propio dolor. Generalmente, los momentos oscuros son un llamado para observar lo que ocurre dentro de nosotros. Son esos momentos donde podemos encender la luz, o mantenerla apagada. La visión depende de la luz. Es por eso que en la oscuridad no vemos nada (Tweet!) Cuando alguien nos engaña, cuando nos sentimos traicionados, la confianza en nosotros mismos se ve gravemente amenazada. Luego de hacer el proceso de coaching, le asigné a Ana la tarea de conectarse con la parte de ella que estaba segura de sí misma. Es una parte que todos tenemos, incluso hasta cuando menos lo creemos. Ana supo enseguida que independientemente de lo que le habían hecho, este incidente era la oportunidad perfecta para elevar su amor propio y la confianza que tiene hacia ella. Acto seguido, Ana supo ese día dejar su cama y salir a por lo que le hacía sentirse bien en ese momento. Cada día me escribía para contarme qué tan segura se sentía... Unos días más tarde, Ana me escribió para decirme que que se sentía tan segura de ella, que hasta Beyonce "la llamó" para pedirle consejo. ¿Qué tal eso? Un momento gris iluminado por la magia... Beyoncé, la reina de la seguridad en el escenario, se vio inspirada por la confianza que logró Ana (o al revés ) Espero que esta historia te inspire a sacar la seguridad que tienes en ti. En esos momentos de desconfianza en ti, pregúntate: ¿Qué haría Beyoncé con esto, en este momento? (o cualquier otra persona) Y déjate sorprender . Por favor, sigue creyendo en ti. Recibe un abrazo,