Sobrevive a las vacaciones en grupo

Las vacaciones: tiempo para conocernos.

Llevas tiempo con un estilo de vida nuevo, y permíteme felicitarte por la valentía y el coraje que has demostrado al quererlo y hacerlo.

Ahora llegan tus vacaciones, en ese tiempo donde todo se supone que ha de ser bonito, corres el inevitable riesgo de enfrentarte a tus antiguos patrones y comportamientos. Confrontarte con esas antiguas cosas que ya no haces, pero que hacen y siguen haciendo los que vacacionan contigo: familia, amigos, relaciones.

Si tienes por lo menos a alguien que te acompaña en este nuevo estilo de vida, une fuerzas con esa persona. Si no lo tienes, une fuerza con la mejor persona que existe: tú mismo.

Tienes que saber que tu estilo de vida es tuyo. De más nadie. Necesitas conservar tu calidad de tiempo y tus buenas energías, así que no busques transmitirle tu estilo a nadie. Por más que quieras que todos se unan a ti, si lo quieres promocionar considera la opción de hacerlo a través de tu actitud y tu mejor ejemplo.

Así como tu estilo es tuyo, necesitas protegerlo. Necesitas defenderlo con capa y espada si es necesario, pues no es justo que en unos días dañes o te hagan dañar lo que en tanto tiempo has cultivado.

Aquí te muestro 3 pasos que te pueden servir: 1. Advierte sobre tu nueva condición: Informa si es posible a tus acompañantes sobre lo que haces y ya no haces, y diles que esperas de su apoyo y respeto en tu nueva decisión.

2. Asigna a tu “ángel de la guarda”: Busca de ser posible a alguien que se comporte como tu protector durante todo el viaje. Asígnale esa misión y pídele que la cumpla y respete, independientemente de lo que cree o piense.

3. Sé tu propio motivador: Repítete constantemente que lo estás haciendo bien. Repítelo especialmente cuando sientas temor, dudas o ganas de retroceder. Felicítate de igual forma por tus logros y las situaciones que hayas superado cada día. Siendo tu propio motivador necesitarás menos aprobación y validación del resto.

Recuerda que en todo cambio siempre hay confrontaciones, las internas y las externas. Tu misión es mantenerte firme ante tu nuevo propósito, moviéndote constantemente hacia arriba y hacia adelante.

Cuento contigo para que protejas esta nueva versión de ti. No la entregues por un placer momentáneo, ni mucho menos por la facilidad de encajar ante los demás. Si vas a encajar, que sea con la nueva versión que tienes de ti.

Créeme: si puedes sobrevivir estas vacaciones manteniendo tu estilo de vida, podrás lograr de todo.

Te felicito de antemano. ¡Yo sé que tú puedes!